¿Por qué es una lente que marca la diferencia?

Porque al contrario de la mayoría de lentes de contacto, la lente Orto-k se utiliza por la noche, es decir, cuando nos vamos a dormir. Mientras el paciente duerme, la lente Orto-k corrige temporalmente su graduación visual y como consecuencia el paciente no tiene que utilizar ni gafas ni tampoco lentillas durante el día.

Pero no todo es oro lo que reluce sobre esta lente, puesto que se deben de llevar controles muy frecuentes para ver si éstas se adaptan bien al paciente, evitando de esta forma posibles infecciones y/o alteraciones en el tejido ocular.

La lente Orto-k está especialmente indicada para los siguientes casos:

  • Cuando se práctica alguna actividad incompatible con el uso de gafas o lentes de contacto convencionales, como por ejemplo la natación.
  • Cuando existe intolerancia a otro tipo de lentes.
  • Cuando se precisa superar pruebas médicas y otras lentes o la intervención quirúrgica no es la solución.
  • Para el control de la miopía y el astigmatismo.

Eso sí, para que la lente Orto-k pueda rendir a su mejor nivel hay que tener presente las siguientes consideraciones:

  • Las horas de sueño deben ser entre 6 y 8.
  • Manipular de forma correcta la lente a la hora de ponérsela y al retirarla.
  • Desinfectarla de forma correcta.
  • Evitar movimientos oculares excesivos durante el sueño.
  • Reemplazarla en el plazo estipulado por el laboratorio.

Si usted está pensando que quizá pudiera ser un candidato a Orto-K, póngase en contacto con nosotros, en Óptica Leví, donde nuestro personal cualificado le hará un estudio personalizado y valorará el posible uso de dichas lentes, así como responderá a cualquier duda o consulta que tenga al respecto.

Ortiz, José A.

8/6/2022